La primera duda que plantea el autor es que en la pareja de levedad/peso ¿qué es lo negativo y qué es lo positivo?, ¿es mejor sentirse ligero o pesado? Su respuesta es que el peso, la carga, es lo que es positivo, lo que llevamos bien, mientras que lo que no soportamos es la levedad.
A partir de ahí plantea las historias de varios personajes teniendo como hilo conductor la historia de la pareja formada por Tomás y Teresa y como fondo la ocupación de Praga por los rusos.
Aparte de la política y de inquietudes de los distintos personajes, el tema que más se repite es la infidelidad, la infidelidad compulsiva y los celos. Desde el marido que tiene una amante y el día que se lo cuenta a su mujer y la abandona, le abandona a él su amante, que vivía muy a gusto en la clandestinidad, pasando por el marido que se acuesta con muchísimas mujeres pero no le es “inflel” a su mujer porque no duerme con ellas y no repite mucho con sus amantes, o la persona que sólo tiene una aventura en su vida, hasta la que siente unos celos atroces pero no abandona a su pareja.
La primera vez que lo leí, sin llegar a cambiarme la vida, como dijo un amigo mío que le había pasado a él, me gustó mucho, y me hizo plantearme muchas cosas. Esta vez, pese a que me ha vuelto a gustar, ya no me ha hecho plantearme tantas cosas, algunas sí, que es un libro muy reflexivo, y además pinta distintas reacciones muy humanas para problemas diversos, pero no sé si es que me he leído “La inmortalidad” (del mismo autor, y también por segunda vez) hace poco, o que muchas cosas de las que plantea ya no me sorprenden. En resumen, ya no lo he flipado, pero aún así es una gran lectura.
Voy a poner dos ejemplos de reflexiones del autor:
El “pequeño diccionario de palabras incomprensibles”: plantea que cada persona tiene su propio significado (asociado) para un montón de palabras, y que por eso estamos destinados a no entendernos unos a otros, por ejemplo para alguien un cementerio puede ser un lugar muy romántico y tranquilo mientras que fácilmente para otra persona es un lugar horrible que le inspira pesadillas. El autor, al mismo tiempo que explica eso como el origen de la incomprensión entre personas, también dice que cabe la posibilidad de que si se conoce desde hace mucho tiempo a alguien, y se pasa mucho tiempo juntos, sus vocabularios puede que se vayan acercando y ellos se puedan entender al hablar, porque hayan construido los mismo significados.
La debilidad / fortaleza: un personaje entiende en un momento dado que casi toda la sociedad une esa pareja de antónimos con la de víctima / culpable. De forma inconsciente alguien débil nos parece una víctima, y no sólo eso, sino que alguien por ser fuerte nos parece culpable. Ese personaje se da cuenta que los que son fuertes se sienten culpables y son los que siguen la voluntad del débil, que es el que dirige, que a fuerza de creerse débil (y víctima) se comporta de forma que consigue gobernar al otro.
En wikipedia, aunque me ha gustado más este análisis.
Leyendo: Pantaleón y las visitadoras, de Vargas Llosa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario